sábado, 31 de diciembre de 2016

"Déjate llevar", una canción de Coque Malla ft. María Rodés en "Mujeres" (2014)


Ficha Técnica:



Single: "Déjate llevar"

Álbum: Mujeres


Género: Pop

Intérprete: Coque Malla ft. María Rodés

País: España

Año: 2014



De oídas:


En ocasiones es preferible mantenerse en silencio a encadenar sin acierto palabras vacías de contenido. Hoy seré breve, el tiempo apremia.

He tenido la suerte de escuchar a Coque Malla a apenas dos metros de mí, sin escenario que medie altivo entre ambos, a ras de suelo. He tenido la inmensa suerte de disfrutar de la sencillez de un gran artista, uno de esos que, sin ser de mis preferidos, admiro por haber sabido mantenerse donde ha querido en cada momento, sin importarle estar arriba o abajo, con la satisfacción anónima de dos amantes bien avenidos en la cama.

Dudé, dudé mucho sobre qué canción de entre todas ellas elegir para finalizar este irregular 2016. Y es que musicar los sentimientos es lo que tiene, difícil de enfrentarse a la elección de qué dedo de la mano cortar o a quién querer más a mamá o a papá. En realidad, todo depende del momento, del cuándo, cómo y con quién (con los años he aprendido que los “por qué” siempre suponen una pérdida inútil de tiempo). Hasta el último minuto dudé entre la canción que da título a esta entrada y "Lo intenta", interpretada junto a Ángela Molina. Ese "Y pasa de largo el tren especial, y ya no te arriesgas, ya no lo intentas" me recuerda a las veces que perdemos una oportunidad de oro expuesta en una bandeja de plata, simplemente, porque no somos capaces de dar el primer paso, tal vez por miedo, tal vez por desconfianza, por falta de honestidad con uno mismo y con los demás, por tantas y tantas razones que pretenden justificar nuestra desidia vital. En fin. Huelga decir que la mayor de los Molina es grande, grande en su plenitud de significado, en todas sus acepciones... pero las voces de María Rodés y Coque Malla tienen la habilidad de desenredar un cabello enmarañado solo con los dedos, con infinita paciencia y dulzura, sin tirones, sin dolor. 

Acaba este irregular 2016 con la esperanza de que el impar por venir sea más llevadero. Que solo importe lo importante. Que las palabras necias sigan chocando contra los oídos sordos. Que te dirijas hacia donde te apetezca. Tú solo, sin condicionantes ni condiciones absurdas. Es posible si quieres. Déjate llevar.





A cappella:

Hay tantas cosas que echo de menos. Y tantas y tantas que echo de más. Las cuentas no cuadran nunca entre lo que tienes y lo que quieres, entre lo que quieres y lo que deseas, entre lo que deseas y lo que tienes. Con los años te sientes capaz de cuadrar las cifras para que no llamen demasiado la atención a ojos ajenos. Pasas los días haciendo y deshaciendo números para llegar a fin de mes con el lado derecho de tu cerebro, el creativo y pasional, en comunión con el izquierdo, el que corta las alas antes de que eches a volar para evitar así una hipotética caída. Y acaba otro año de la misma manera...  


Por eso, déjate llevar, hazme caso, déjate llevar aunque las cuentas no salgan, aunque termines el mes en negativo, aunque el rojo prime sobre el negro en tu extracto bancario. Déjate llevar porque, aunque te digan mil veces NO, siempre es mejor caminar bajo el sol en busca de un solo SÍ que permanecer sentado. Déjate llevar porque nada está escrito y, en cualquier caso, aunque lo estuviera, existen en la actualidad demasiados mecanismos para borrar aquello que no nos gusta. Reescribe tu propia historia, solo necesitarás una pizca de paciencia. Reescríbela. Da igual la fuente de la letra y el interlineado, a nadie le importa el estilo, créeme. Tú limítate a escribir para ti, sobre todo para ti. Y si tienes tanto tiempo como ganas, hazlo para los demás. Y si aún te queda algo de tiempo y ganas, hazlo para mí. Al fin y al cabo, bailamos al ritmo que nuestras propias circunstancias imponen y, aunque a veces nos venzan nuestras siluetas talladas en el sofá, ambos poseemos intacta la libertad de soñar. Déjate llevar, hazme caso, déjate llevar aunque no te motive la música que suena, aunque no te entiendas con tu pareja de baile, aunque te encuentres atado de pies y manos a una realidad asfixiante. Tú solo… déjate llevar. 

El tiempo no pasa en vano. 



¡FELIZ, VENTUROSO Y AVENTURADO 2017!